El Peso de la Oración
Maná del Líder Lunes 22 de julio, 2024 Al servicio de la comunidad profesional y de negocios EL PESO DE LA ORACIÓN U na mujer pobremente vestida, con un rostro que reflejaba derrota, entró a una tienda. La mujer se acercó al dueño de la tienda y, de la manera más humilde le preguntó si podía llevarse algunas cosas a crédito. Con voz suave le explicó que su esposo estaba muy enfermo y que no podía trabajar; tenían siete niños y necesitaban comida. El dueño le pidió que abandonara su tienda. Sabiendo la necesidad que estaba pasando su familia la mujer continuó: -"¡ Por favor señor! Se lo pagaré tan pronto como pueda ". El dueño le dijo que no podía darle crédito ya que no tenía una cuenta de crédito en su tienda. De pie cerca del mostrador se encontraba un cliente que escuchó la conversación entre el dueño de la tienda y la mujer. El cliente se acercó y le dijo al dueño de la tienda que él se haría cargo de lo que la mujer necesitara para su familia. El dueño, pre