El paraguas

Maná del Líder
Lunes 14 de junio, 2021
Al servicio de la comunidad profesional y de negocios

EL PARAGUAS

En un pueblito de zona rural en los años 50, se produjo una larga sequía que amenazaba con dejar en la ruina a todos sus habitantes, debido a que subsistían con el fruto del trabajo del campo. 

A pesar de que la mayoría de sus habitantes eran creyentes, ante la situación
límite, marcharon a ver al pastor local y le dijeron:

- "Si Dios es tan poderoso, pidámosle que envíe la lluvia necesaria para revertir esta angustiante situación."

- "Está bien, le pediremos al Señor, pero deberá haber una condición indispensable."

- "¡Díganos cuál es!", respondieron todos.

- "Hay que pedírselo con fe, con mucha fe, contestó el líder espiritual."

- "¡Así lo haremos, y también vendremos a la iglesia todos los días!"

Los campesinos comenzaron a ir a la iglesia todos los días, pero las semanas transcurrían y la esperada lluvia no se hacía presente. Un día, fueron todos a enfrentar al pastor y reclamarle:

- "Usted nos dijo que si le pedíamos con fe a Dios que enviara las lluvias, Él iba a acceder a nuestras peticiones. Pero ya van varias semanas y no obtenemos respuesta alguna."

- "¿Han ustedes pedido con fe verdadera?", les preguntó el ministro.

- "¡Sí, por supuesto!", respondieron al unísono.

- "Entonces, si dicen haber pedido con Fe Verdadera... ¿por qué durante todos estos días ni uno solo de ustedes ha traído el paraguas?"


REFLEXIÓN:

A menudo el problema no es traer el paraguas, es convertir a Dios en paraguas. Esto es buscarle solo cuando hay problemas o necesidad.  Buscar las bendiciones de Dios, pero no al Dios de las bendiciones.  La firma Barna que realiza muchos estudios entre creyentes cristianos encontró que más del 90% de las oraciones de los creyentes cristianos califican como peticiones, pedimos de todo.  Y que casi el mismo porcentaje son peticiones vinculadas a la economía.

Orar significa hablar con Dios, íntimamente, como lo hacemos con alguien que de verdad nos ama, que es nuestro mejor amigo.  Pero a menudo, nuestra conversación pasa de intima a insolente cuando sujetamos la relación a que esta nos beneficie de algún modo.   No hay ningún pecado en pedir, lo podemos hacer todos en el nombre de Jesucristo dice la escritura, pero Santiago nos advierte que pidamos bien.  

Esto es con fe, creyendo que Dios lo va a hacer aunque nuestros ojos naturales no lo vean, y segundo de acuerdo a su perfecta voluntad y no la nuestra, porque El es Dios y nosotros no.  Somos amigos, pero no somos iguales.  Dios no es sordo, El escucha todas las peticiones pero a menudo no nos gusta escuchar el NO de su silencio.  Dios ya contesto, nos guste o no.

FRASE DE PODER:
La fe es el combustible del fuego de los  milagros

ESCRITURA:
Hebreos 11:1 (LBLA)
"Ahora bien, la fe es la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve."

Podríamos empezar diferente nuestra oración a Dios hoy.  En lugar de golpearnos una y otra vez con la misma piedra, pidamos que sea haga la voluntad de Dios en nuestra vida, familia, comunidad, trabajo y ministerio y no la nuestra. 

Reconozcamos que El es Dios, y que lo necesitamos, pero que sobretodo anhelamos conocerlo y con agradecimiento recibir por fe todo, bueno o no, que El decida porque todo nos ayudara a bien.

Hasta la próxima,

Juan Carlos Flores Zúñiga

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