Dar Gracias

Maná del Líder
Lunes 6 de abril, 2020
Al Servicio de la Comunidad Profesional y de Negocios

DAR GRACIAS

Una madre solía orar en las noches con una hija pequeña, de unos seis años, al acostarla.

Una noche la madre le dijo:
"- Hoy vamos a pedir a Dios un poco más para que sane a la tía Marta."

Oraron por la tía Marta, cada noche, durante un par de semanas. Después, la madre no dijo nada y dejaron de pedir.

A la tercera o cuarta noche sin hacerlo, la niña preguntó:
"- Mamá, ¿por qué no oramos por la tía Marta?"
"- Es que Diosito ya la puso buena" – respondió la madre.
"- Y si la puso buena" – replicó la niña- "¿no deberíamos orar para darle las gracias?"

REFLEXIÓN

Hay muchos tipos de oración, pero las petitorias dominan el espectro. Es como cuando éramos niños y deseábamos algo que papá o mamá no querían darnos por alguna buena razón, y sin embargo, insistíamos pidiendo, para luego olvidarnos de mostrar agradecimiento una vez que nuestra petición era satisfecha. Había momentos más dramáticos, cuando sin terminar de pedir por algo, empezábamos a pedir por algo más, empujando la espiral de la insatisfacción.

Ahora, el problema es que la mayoría de nuestras peticiones por medio de la oración a Dios se enfocan en lo material y la satisfacción emocional. Sin embargo, la oración más poderosa que conozco es la que se hace en favor de las necesidades de otros, posponiendo las nuestras en favor de los demás. Esto es claro en la palabra de Dios que nos llama a orar unos por otros, y si bien podemos pedir, también se nos urge a hacerlo con un corazón sincero y agradecido.

Somos más dados a pedir que a agradecer. Por ello, la historia de aquellos diez leprosos sanados milagrosamente por Jesús y de los cuales solo uno vuelve para dar las gracias se repite cotidianamente. Jesús es como un 911. Solo lo llamamos para emergencias, luego nos quejamos cuando no recibimos respuesta a nuestras oraciones.

FRASE DE PODER
Recibir gracia, sin dar gracias, trae desgracia

ESCRITURA
1 Crónicas 16:8 (LBLA)
"Dad gracias al Señor, invocad su nombre; dad a conocer sus obras entre los pueblos."

De cada diez veces que pedimos, quizás, no damos gracias ni una. La gratitud del que pide abre la mano del que da: el agradecimiento facilita la generosidad. ¡Y tenemos tanto que agradecer a Dios!

Ora para que des gracias hoy

Juan Carlos Flores Zúñiga
FUNDACION LIDERINNOVA