La Regla de los 20 segundos

Maná del Líder
Lunes 10 de Febrero, 2020
Al Servicio de la Comunidad Profesional y de Negocios

LA REGLA DE LOS 20 SEGUNDOS

Una pareja de jóvenes tenía varios años de casados y nunca pudo tener hijos.  Para no sentirse tan solos compraron un cachorro Pastor Alemán, el cual criaron como si fuera su propio hijo.  El cachorro creció hasta convertirse en un grande y hermoso Pastor Alemán. El perro salvó en más de una ocasión a la pareja de ser atacada por los ladrones. Siempre era un perro fiel a sus dueños contra cualquier peligro.


Luego de 7 años de tener al perro, la pareja logró tener al hijo tan ansiado, la pareja estaba tan contenta con su nuevo hijo que disminuyeron las atenciones que tenían para con el perro. Éste se sintió relegado y comenzó a tener celos del bebé. Gruñía cuando sus dueños paseaban al bebé y no era el perro cariñoso y fiel que tuvieron durante 7 años.


Un día la pareja dejó al bebé plácidamente durmiendo en la cuna, mientras preparaban una carne en la terraza. Cual no sería su sorpresa, cuando al dirigirse al cuarto del bebé, ven al perro con la boca ensangrentada moviendo la cola. El dueño del perro pensó lo peor, en su temor se exaltó emocionalmente sacó un arma y en el acto mató al perro fiel.


Corrieron al cuarto del bebé y con gran asombro lo encontraron tranquilamente durmiendo. En la parte debajo de la cuna del bebé encontraron una serpiente degollada.
El dueño lloró amargamente lamentándose:  
-“He matado a mi perro fiel”.

REFLEXIÓN

Cuántas veces hemos juzgado impulsiva e injustamente a las personas. Lo que es peor, las juzgamos y las condenamos sin investigar a qué se debe su comportamiento, cuáles son sus pensamientos y sentimientos e intenciones.  Hemos “matado” a muchos amigos leales y compañeros de viaje devotos por no hacer un alto en medio de nuestro emocionalismo para aclarar una situación.

Una de las enseñanzas equivocadas que recibí en mi formación ministerial fue la afirmación de que no existía la madurez emocional. "Las emociones solo conducen a lo peor, no son controlables", reiteraba un pastor veterano.  Con los años he descubierto que sin madurez o inteligencia emocional estamos condenados a repetir los mismos errores y dañar a quienes realmente importan. La madurez no es automática, ni viene por unción divina. Es un proceso intencional al que debemos comprometernos diariamente y paso a paso. 
Ojalá rindiendo cuentas a un igual de confianza.


A menudo las cosas no son tan malas como parecen, sino todo lo contrario. Pero, cuando somos negligentes respecto a la madurez emocional terminamos esclavizado a ser reactivos debido a lo que llamaremos la "regla de los 20 segundos".  Ante una situación de pánico, o excitación emocional, estrés o preocupación, la sangre fluye al cerebro con mas rapidez endureciendo las arterias que oprimen el cerebro humano donde reside la función del pensamiento.

Como resultado la persona deja de pensar y actúa sin cordura, a menos que hayamos creado una disciplina hacia la madurez emocional.  20 segundos toma al cerebro procesar el estimulo y darle el significado correcto. Esa es la diferencia entre un hombre que asesina a su compañera, o golpea a su hijo, o lastima a un prójimo sin pensar, tomado por sus emociones. Si tan solo esperáramos veinte segundos antes de actuar, sin tan solo decidiéramos no seguir siendo adolescentes emocionales y asumiéramos el compromiso de crecer, de caminar hacia una espiritualidad emocionalmente sana.

FRASE DE PODER 
Pensar antes de actuar no es opcional

ESCRITURA
Levítico 19:15 (LBLA)
"No harás injusticia en el juicio; no favorecerás al pobre ni complacerás al rico, sino que con justicia juzgarás a tu prójimo."

Mucha gente deja que su inmadurez emocional controle su vida, en lugar de dar oportunidad a la disciplina espiritual y emocional, y la madurez que fomenta la distancia y la reflexión que permiten controlarlas antes de actuar.  El temor es uno de los aceleradores de estos gatillos que pueden destruir lo que mas amamos o comprometer nuestro futuro para siempre. Antes de actuar, sujete sus emociones. Recuerde es un pecado no madurar.

Oro para que este día decidas caminar hacia tu madurez emocional y espiritual. Si quieres aprender mas sobre esto por favor visita ya Espiritualidad Emocionalmente Sana  

Hasta la próxima,

Juan Carlos Flores Zuñiga
FUNDACION LIDERINNOVA

Comentarios

Jesus Benitez dijo…
Amado hermano, estoy muy agradecido por el maná de cada lunes. Enriquece notablemente mi vida cada día.

Hermano Juan Carlos: Que Dios lo colme de bendiciones cada día más por sus mensajes.



Conj Gratitud:
JESUS A. BENITEZ

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