Lo que Gano cuando Pierdo
Maná del Líder
Lunes 13 de Enero, 2020
Al Servicio de la Comunidad Profesional y de Negocios
LO QUE GANO CUANDO PIERDO
En Abril 6, 1865, más de seis mil soldados confederados fueron capturados. El final era inminente. La mañana del 9 de Abril, el General Lee y sus hambrientos hombres se encontraron rodeados por cinco veces más soldados de la Unión que aquellos que estaban con él. Lee no tuvo más elección que rendirse.
Podría ser imposible describir la angustia de las tropas cuando se supo que la rendición era inevitable. Cuando el General Lee apareció tras la rendición, un grito de bienvenida instintivamente corrió en medio de las tropas. Pero sus gritos instantáneamente cedieron al silencio. Todos los sombreros fueron levantados, y sus desgastadas caras fueron bañadas con lágrimas.
Conforme él lentamente se desplazó a lo largo de las líneas, centenares de sus devotos veteranos se apretujaron alrededor del General Lee. Con lágrimas rodando libremente sobre sus varoniles mejillas, el general dijo adiós a su ejército.
REFLEXIÓN
Rendición. Es una palabra siniestra e intimidante. Puede despertar imágenes de banderas blancas levantándose y armas siendo rendidas. Puede hacernos pensar en "ceder" y "darse por vencido." La derrota y la humillación a menudo van de la mano con la rendición.
Por eso, cuando hablamos de que la rendición es vital para la vida Cristiana, puede sonar duro y difícil, a menos que nos rindamos para algo mejor. El apóstol Pablo habla sobre rendición (compromiso total) en Romanos 12:1 (NVI) cuando dice "Por lo tanto, hermanos, tomando en cuenta la misericordia de Dios, les ruego que cada uno de ustedes, en adoración espiritual, ofrezca su cuerpo como sacrificio vivo, santo y agradable a Dios".
Ofrecer mi cuerpo como sacrificio vivo puede parecer sobrecogedor.
En los tiempos antiguos, cuando los animales era ofrecidos sobre el altar, el sacrificio era total y final. Esa es la imagen en Romanos 12:1. Pablo está llamándonos a arrastrarnos de buena gana al altar y ofrecernos en rendición total y final. No hay tal cosa como una rendición parcial.
Este llamado a ofrecer nuestros cuerpos como sacrificios vivos está enfatizado por dos frases interesantes. Primero, el dice que nosotros nos ofrezcamos "tomando en cuenta la misericordia de Dios." La rendición se da en respuesta a la misericordia de Dios. Cuando usted realmente comprende de que ha sido salvado, cuando usted profundamente siente la gracia inmerecida y libre que lo ha liberado, la rendición es motivada por la gratitud. Rendición es decir a Dios: "Por todo lo que has hecho por mi y en mi, todo lo que soy y todo lo que tengo, contento te lo rindo a ti."
Segundo, Pablo dice que nuestra rendición es un "acto espiritual de adoración." La palabra espiritual literalmente significa lógico o razonable o aceptable. Si Dios realmente es el rey, gobernante, y señor del universo y si El realmente envió a su hijo a morir en mi lugar; entonces es "lógico" para mi rendirme a El como un acto de adoración. Dios quiere el mismo lugar en mi vida que El ya tiene en el universo. Y, eso es razonable.
Nuestro problema es que tendemos a enfocarnos en aquello a lo que renunciamos en lugar que aquello que recibimos a cambio. Lo que no entendemos es que el "Compromiso total (Rendición) es el canal mediante el cual lo mejor de Dios y sus mejores bendiciones fluyen".
La Biblia dice que Dios quiere que tu experimentes una vida abundante - aquí mismo y ahora. Y el conducto a través del cual Dios toma sus bendiciones y las derrama en nuestra vida es una tubería llamada RENDICIÓN. Entonces, ¿Qué es lo que nos impide rendirnos?
FRASE DE PODER
Rendición es confiar en el corazón de Dios hacia nosotros y encomendarle nuestro corazón a El
ESCRITURA
Marcos 11:15-17 (NVI)
"Por lo tanto, hermanos, tomando en cuenta la misericordia de Dios, les ruego que cada uno de ustedes, en adoración espiritual, ofrezca su cuerpo como sacrificio vivo, santo y agradable a Dios.»
¿De que tiene temor cuando piensa en rendirse a Dios? ¿Que lo hace dudar de rendir todo? Conforme recuerda las frases al inicio y al final del llamado de Dios a rendirse - Su misericordia y la razonabilidad de su invitación —usted estará en camino a a confiar en El con todo su ser.
Juan Carlos Flores Zúñiga
FUNDACION LIDERINNOVA
Lunes 13 de Enero, 2020
Al Servicio de la Comunidad Profesional y de Negocios
LO QUE GANO CUANDO PIERDO
En Abril 6, 1865, más de seis mil soldados confederados fueron capturados. El final era inminente. La mañana del 9 de Abril, el General Lee y sus hambrientos hombres se encontraron rodeados por cinco veces más soldados de la Unión que aquellos que estaban con él. Lee no tuvo más elección que rendirse.
Podría ser imposible describir la angustia de las tropas cuando se supo que la rendición era inevitable. Cuando el General Lee apareció tras la rendición, un grito de bienvenida instintivamente corrió en medio de las tropas. Pero sus gritos instantáneamente cedieron al silencio. Todos los sombreros fueron levantados, y sus desgastadas caras fueron bañadas con lágrimas.
Conforme él lentamente se desplazó a lo largo de las líneas, centenares de sus devotos veteranos se apretujaron alrededor del General Lee. Con lágrimas rodando libremente sobre sus varoniles mejillas, el general dijo adiós a su ejército.
REFLEXIÓN
Rendición. Es una palabra siniestra e intimidante. Puede despertar imágenes de banderas blancas levantándose y armas siendo rendidas. Puede hacernos pensar en "ceder" y "darse por vencido." La derrota y la humillación a menudo van de la mano con la rendición.
Por eso, cuando hablamos de que la rendición es vital para la vida Cristiana, puede sonar duro y difícil, a menos que nos rindamos para algo mejor. El apóstol Pablo habla sobre rendición (compromiso total) en Romanos 12:1 (NVI) cuando dice "Por lo tanto, hermanos, tomando en cuenta la misericordia de Dios, les ruego que cada uno de ustedes, en adoración espiritual, ofrezca su cuerpo como sacrificio vivo, santo y agradable a Dios".
Ofrecer mi cuerpo como sacrificio vivo puede parecer sobrecogedor.
En los tiempos antiguos, cuando los animales era ofrecidos sobre el altar, el sacrificio era total y final. Esa es la imagen en Romanos 12:1. Pablo está llamándonos a arrastrarnos de buena gana al altar y ofrecernos en rendición total y final. No hay tal cosa como una rendición parcial.
Este llamado a ofrecer nuestros cuerpos como sacrificios vivos está enfatizado por dos frases interesantes. Primero, el dice que nosotros nos ofrezcamos "tomando en cuenta la misericordia de Dios." La rendición se da en respuesta a la misericordia de Dios. Cuando usted realmente comprende de que ha sido salvado, cuando usted profundamente siente la gracia inmerecida y libre que lo ha liberado, la rendición es motivada por la gratitud. Rendición es decir a Dios: "Por todo lo que has hecho por mi y en mi, todo lo que soy y todo lo que tengo, contento te lo rindo a ti."
Segundo, Pablo dice que nuestra rendición es un "acto espiritual de adoración." La palabra espiritual literalmente significa lógico o razonable o aceptable. Si Dios realmente es el rey, gobernante, y señor del universo y si El realmente envió a su hijo a morir en mi lugar; entonces es "lógico" para mi rendirme a El como un acto de adoración. Dios quiere el mismo lugar en mi vida que El ya tiene en el universo. Y, eso es razonable.
Nuestro problema es que tendemos a enfocarnos en aquello a lo que renunciamos en lugar que aquello que recibimos a cambio. Lo que no entendemos es que el "Compromiso total (Rendición) es el canal mediante el cual lo mejor de Dios y sus mejores bendiciones fluyen".
La Biblia dice que Dios quiere que tu experimentes una vida abundante - aquí mismo y ahora. Y el conducto a través del cual Dios toma sus bendiciones y las derrama en nuestra vida es una tubería llamada RENDICIÓN. Entonces, ¿Qué es lo que nos impide rendirnos?
FRASE DE PODER
Rendición es confiar en el corazón de Dios hacia nosotros y encomendarle nuestro corazón a El
ESCRITURA
Marcos 11:15-17 (NVI)
"Por lo tanto, hermanos, tomando en cuenta la misericordia de Dios, les ruego que cada uno de ustedes, en adoración espiritual, ofrezca su cuerpo como sacrificio vivo, santo y agradable a Dios.»
¿De que tiene temor cuando piensa en rendirse a Dios? ¿Que lo hace dudar de rendir todo? Conforme recuerda las frases al inicio y al final del llamado de Dios a rendirse - Su misericordia y la razonabilidad de su invitación —usted estará en camino a a confiar en El con todo su ser.
Oro por una semana de rendición donde Dios haga lo imposible.
Juan Carlos Flores Zúñiga
FUNDACION LIDERINNOVA
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nuestras oraciones por su vida y ministerio.
Sirviendo en amor: Ignacio