La Mano
Lunes 12 de diciembre, 2022
Para la Comunidad Profesional y de Negocios
LA MANO
En el editorial de un periódico se registró la historia de una maestra que pidió a sus alumnos de primer año de primaria, todos provenientes de una zona de extrema pobreza, que hicieran un dibujo de algo por lo cual estuvieran agradecidos al acercarse la fecha de "acción de gracias".
Pensó en cuán poco tendrían que estar agradecidos estos niños de barrios pobres, pero sabía que la mayoría de ellos dibujaría pavos asados o mesas con comida. La maestra quedó desconcertada con el dibujo que Diego le entregó... Una simple mano infantilmente dibujada.
-"Creo que debe ser la mano de Dios que nos da la comida", dijo un niño.
-"Un granjero", sugirió otro, "porque el cría pavos".
Finalmente, cuando los otros niños estaban trabajando, la maestra se acercó al pupitre de Diego y le preguntó de quién era la mano.
-"Es su mano maestra", balbuceó.
Ella recordó que, frecuentemente, en el recreo había llevado de la mano a Diego, un niño bajito y solitario.
A menudo hacía eso con los niños, pero para Diego significaba mucho. Quizás en esto consistió la acción de gracias de todos, no por las cosas materiales que se nos dan, sino por la oportunidad, por pequeña que sea, de dar a otros.
REFLEXIÓN:
En estos días en que nos cuesta reconocer que tenemos muchas cosas por las que estar agradecidos con Dios: la salud, su provisión, amor, perdón incondicional, gracia, poder, esta historia nos hace reflexionar en como nuestra mano puede reflejar a Dios en la vida de otras personas grandes o pequeñas al punto de hacer un impacto extraordinario, pasando por encima de heridas, complejos, y circunstancias difíciles.
Cuando alguien tiene un gesto de amabilidad conmigo o responde a un gesto amable como saludar, abrazar, sonreír pienso en cuanto mi mano y mi ser alegran a Dios cuando hago lo que El hace cada día por todos. Posiblemente mis manos no sean las de alguien famoso, poderoso o influyente. Pero mis manos pueden llevar luz, paz, y amor a tantos. Porque cuando mis manos obran según el modelo de Cristo, y dan a manos llenas a quienes no tienen nada, ni esperanza, Dios se vacía en esas personas que alcanzamos. Al fin y al cabo no son mis manos, sino Sus manos en mis manos, tocando las manos de todos los que El pone en mi camino.
Una mañana de estas iba para la iglesia y un joven indigente se acerco a la ventana del auto en una parada de semáforo, para contarme su historia con el fin de recibir una limosna o ayuda. Por un momento casi olvido el poder de mis manos en las manos de Dios: habituado a escucharlos, no quise oír lo que tenia que decir para justificar su petición, para ahorrarle la pena. Le dije que no tenia dinero, pero si fruta y le regale una manzana. Lo mas importante, sin embargo, no fue darle algo para calmar el hambre en su estomago, sino estrechar su mano y tratarlo con dignidad. Tus manos y mis manos pueden hacer toda la diferencia aun en los pequeños momentos del dia.
FRASE DE PODER:
Tus manos en las manos de Dios harán maravillas.
ESCRITURA:
Hebreos 2:7 (LBLA)
"(Al hombre) Le has hecho un poco inferior a los ángeles; le has coronado de gloria y honor, y le has puesto sobre las obras de tus manos;”.
La próxima vez que uses tu mano solo recuerda a quien debe reflejar y a quien no. No pierdas la oportunidad de sembrar una buena semilla en la vida de alguien que ha cosechado mal por mucho tiempo. Un gesto con la actitud correcta puede hacer una gran diferencia. Quizá Dios pueda sonreír y hacer brillar su rostro sobre ti en ese mismo momento.
Oro por una semana de oportunidades para estrechar manos y sonreír generosamente
Juan Carlos Flores Zúñiga
FUNDACION LIDERINNOVA
Comentarios
SOLO PARA AGRADECER SU REFLEXION HA SIDO UNA BENDICION PARA EL PROGRAMA DE RADIO DE NUESTRA IGLESIA. BENDICIONES!
Y hoy me llega este mana de usted haciéndome reflexionar sobre esto mismo, la cuales me señalan
…Que tenemos muchas cosas por las que estar agradecidos con Dios: la salud, su provisión, amor, perdón incondicional, la familia, gracia, poder…, pasando por encima de circunstancias difíciles...
Y algo muy importante es que podemos estar muy agradecidos a Dios, de poder contar con una mano amiga como la de usted, gracias querido hermano, por que usted siempre se acuerda de nosotros…