¡Seras Grande!

Maná del Líder
Lunes 21 de agosto, 2023
Al servicio de la comunidad profesional y de negocios

Cuando Luciano Pavarotti era un niño, su abuela lo ponía con frecuencia en su regazo y le decía: "Serás grande ya lo verás".

Sin embargo, ¡Los sueños de la abuela era ver a Luciano convertido en un gran banquero! En vez de ello Pavarotti fue maestro. Enseñó por un tiempo en un colegio, cantando algunas veces en ocasiones especiales.

Su padre fue el que lo motivó a desarrollar su voz, reprendiéndolo cada vez que cantaba por debajo de su potencial.

Finalmente a los 22 años, Pavarotti dejó de enseñar... Para vender seguros. Continuó buscando algo estable en donde pudiese apoyarse financieramente, en caso de no tener éxito en el mundo de la música. El negocio de los seguros le permitió tomarse tiempo para tomar lecciones de canto y el resto es historia.

La estrella de la ópera dijo una vez en una entrevista: "Estudiar canto fue el momento del cambio en mi vida. Es un error seguir en la vida el camino seguro". Agregando con un guiño de sus ojos: "Mi Maestro me preparó. Pero ningún maestro me dijo jamás que iba a ser famoso. Solo mi abuela lo hizo



REFLEXIÓN

Se necesita valor para dejar un puesto que se considera seguro y comenzar en una nueva dirección. Pero si no se atreve a arriesgarse, nunca se dará cuenta de su potencial ni sabrá lo que Dios quiso que usted fuese.

Cada uno de nosotros ha sido dotado de una FORMA en particular, nuestro ADN, destinado a cumplir el propósito de Dios en este mundo de una forma única. Sin embargo, las influencias ambientales, culturales y hasta religiosas nos lleva a desear ser cosas para las que no hemos sido destinados y equipados. Tanto en el ámbito del crecimiento espiritual como profesional, hay un tremendo desalineamiento entre lo que hemos sido llamados a ser y lo que nuestras preferencias cortoplacistas y materialistas pretenden que seamos.

En el mundo de los recursos humanos es frecuente el uso de herramientas como DISC, MYER-BRIGGS, Determinador de Fortalezas, para encontrar este alineamiento en el sitio de trabajo entre lo que usted natural y socialmente ha sido preparado para ser y lo que actualmente hace. En el ámbito espiritual no deberíamos aceptar nada menos. Una palabra de aliento, una frase positiva, una afirmación basada en lo que somos, estimula como le ocurrió a Pavarotti, pero todo lo necesario para cumplir ese sueño, llenar con peso eterno esa declaración requiere al menos tres convicciones en nosotros: creerlo es decir tener fe, aprovechar todas las oportunidades de preparación y mentoría para llegar allá, y cultivar la humildad para reconocer en Dios a la fuerza impulsora y directora de nuestras vidas.

Entonces, el temor de dejar la orilla para navegar por aguas desconocidas, nuevas, no prevalecerá contra el llamado de Dios a nuestras vidas y el equipamiento que El ha preparado para los que le aman y desean servirle en cualquier área de la vida en esta tierra.

FRASE DE PODER
Sin dejar la orilla nunca descubrirás nuevos mundos

ESCRITURA
Salmo 138:8 (LBLA) 
"El Señor cumplirá Su propósito en mí, eterna, oh Señor, es tu misericordia, 
no abandones la obra de tus manos."

Tengo la convicción de que usted esta desempeñando tareas a las cuales no ha sido llamado. A veces como hombre o mujer orquesta vive distraído de su centro o foco principal, fatigándose en cosas que no lo edifican, impidiendo alcanzar la plenitud conforme a lo que usted ha sido llamado a ser. Deje de escuchar la multitud y el ruido, y enfóquese esta mañana en Dios, descubra de que esta hecha su FORMA, y luego revise lo que ha estado haciendo.

Oro para que des prioridad a descubrir tu don primario.

Juan Carlos Flores Zúñiga
FUNDACIÓN LIDERINNOVA

Comentarios

Sergio Lopez dijo…
Estimado hermano agradezco sus reflexiones semanales, Dios le bendiga y le guarde.
Pastor Segio Lopez
Panfilo Yapu dijo…
Dios le bendiga Pastor Juan Carlos Flores:
Debo hacer llegar miles de bendiciones porque porque semanlamente recibo la Revista Maná del Lider, realmente tiene un contendiod muy tranformador.
Gracias por todo.
Pánfilo Yapu Cono
Oscar Saravia dijo…
Excelente devocional. Saludos desde Honduras

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