Los acrobatas
Maná del Líder
Lunes 26 de octubre, 2022
Al Servicio de la Comunidad Profesional y de Negocios
LOS ACRÓBATAS
Había una vez un par de acróbatas. El maestro era un pobre viudo y su estudiante una joven llamada Meda. Estos acróbatas actuaban cada día en la calles para poder ganar lo suficiente para comer.
Lunes 26 de octubre, 2022
Al Servicio de la Comunidad Profesional y de Negocios
LOS ACRÓBATAS
Había una vez un par de acróbatas. El maestro era un pobre viudo y su estudiante una joven llamada Meda. Estos acróbatas actuaban cada día en la calles para poder ganar lo suficiente para comer.
Su acto consistía en que el maestro balanceara una alta vara de bambú
sobre su cabeza mientras la joven trepaba lentamente hasta lo más alto. Una vez arriba, se mantenía allí mientras el
maestro caminaba por la calle.
Ambos acróbatas tenían que mantener un enfoque y balance perfectos para
prevenir un accidente y completar su presentación diariamente.
Un día el maestro dijo a su pupila:
-“Escúchame Meda, tú me vigilaras a mí y yo te vigilaré a ti para que podamos ayudarnos mutuamente a mantener la concentración y el balance y así evitar un accidente. Entonces podremos ganar suficiente para comer”
-“Escúchame Meda, tú me vigilaras a mí y yo te vigilaré a ti para que podamos ayudarnos mutuamente a mantener la concentración y el balance y así evitar un accidente. Entonces podremos ganar suficiente para comer”
Pero la joven era sabia y le respondió,
-“Querido maestro, considero que sería mejor que cada uno se vigilará a sí mismo. Vigilarse a uno mismo significa cuidar de ambos. De esa manera estoy segura de poder evitar cualquier accidente y ganar lo suficiente para comer”.
REFLEXIÓN
Para muchos la vida es difícil y deben ser creativos y diligentes para sobrevivir en medio de las circunstancias adversas y personas tóxicas que las rodean. Nuestra cultura no ayuda mucho ya que es pronta a proclamar acción sin pensamiento, como si pudiera salir algo enfocado y balanceado en los actos de alguien inconsciente e irracional.
Robert Browning escribió una vez que, “El
pensamiento es el alma de la acción.” y Ralph Waldo Emerson agregó por su
parte que, “El pensamiento es el asiento
de la acción. El ancestro de toda acción es el pensamiento". Muchos
hemos pensado que podemos gobernar nuestros pensamientos y evitar que se
extravíen o degeneren provocando acciones inmorales e incorrectas.
Algunos hemos tomado la ruta equivocada del maestro de acrobacia poniendo los ojos en otros como si de ello dependiera nuestra propia salvación. Creemos que vigilar e incluso controlar a otros nos dará la satisfacción o el beneficio que anhelamos.
La verdad es que nuestros pensamientos y acciones navegarán a la deriva
hacia la decadencia y la destrucción a menos que cambiemos nuestro enfoque de los demás a nosotros mismos y esto requiere una distinta dieta mental
y espiritual. No obstante, parafraseando a San Agustín más se conoce uno a sí mismo, más conocer a Dios.
Igual que nuestro cuerpo es alterado por lo que consumimos, nuestros
pensamientos son el fruto de cómo alimentamos nuestras almas. Es necesario revisar diariamente nuestra dieta mental, emocional y espiritual. Lo que consumimos proviene en su mayoría de los los medios de comunicación y la cultura que nos contamina con antivalores.
Nuestras mentes igual que nuestros cuerpos parecen vivir con base en una dieta de comida basura, al tiempo que vivimos dependiendo de lo que los demás nos den. Optamos por nutrientes de segunda mano, en lugar de asumir responsabilidad personal por la fuente de nuestra alimentación física, emocional, intelectual y espiritual. No debe extrañar que cuando las cosas salen mal como es de esperar, culpemos a aquellos que nos rodean por nuestros "accidentes y fracasos".
Nuestras mentes igual que nuestros cuerpos parecen vivir con base en una dieta de comida basura, al tiempo que vivimos dependiendo de lo que los demás nos den. Optamos por nutrientes de segunda mano, en lugar de asumir responsabilidad personal por la fuente de nuestra alimentación física, emocional, intelectual y espiritual. No debe extrañar que cuando las cosas salen mal como es de esperar, culpemos a aquellos que nos rodean por nuestros "accidentes y fracasos".
Si realmente deseamos dejar una huella positiva en este mundo
y tener un alma saludable emocional y espiritualmente debemos como enseñaba la aprendiz de acrobata a poner más
atención en nosotros mismos, en conocernos de verdad, en vigilar lo que vemos, escuchamos y hacemos. Nuestra dieta mental y
espiritual debe cambiar hacia lo saludable, lo moral, lo correcto.
No debemos
hacer esto para complacer a los demás, o estar a la moda, sino pensando en nuestra relación con
Dios y nuestro legado, asumiendo responsabilidad por nosotros mismos. Solo así ganaremos enfoque y equilibrio en un mundo que está patas para arriba.
FRASE DE PODER:
Solo uno es responsable de sus errores y fracasos
ESCRITURA:
Salmo 19:14
"Que las palabras de mi boca y la meditación de mi corazón sean de tu agrado, oh Señor, mi roca y mi redentor."
Meditando sobre cuán a menudo alimento mi alma con
basura que consiento en mi vida y luego irresponsable busco culpables por mi estado fuera de mi. No se trata de no conocer lo que ocurre, sino
de discernir lo que me conviene, lo que me es lícito, lo que edifica. Y esa es
mi decisión diaria para vivir una vida que tenga significado y propósito y soy responsable ante Dios por la vida que elijo vivir.
Hasta la próxima
Juan Carlos Flores Zúñiga
Comentarios
Es una gran verdad, necesitamos a Jesús cada día.
Un abrazo fuerte.